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El poder del NO

Si a menudo te sientes identificado con estas preguntas, puede ser que realmente tengas un problema a la hora de decir NO. Hace unos meses, una compañera de trabajo me comentó que le es muy difícil decir NO y que casi siempre antepone los deseos de otras personas a los suyos propios. Por este motivo, le he prometido que escribiría un artículo e intentaría dar algún consejo para ayudarle.
Es muy importante saber decir NO, pero mucho más importante no decir "SÍ" cuando realmente queremos decir "NO".
1. ¿EN QUÉ CONSISTE DECIR NO?
En primer lugar debemos pararnos a pensar que significa decir NO. Decir NO consiste en mostrar de una manera educada y respetuosa nuestro rechazo frente a una petición. Es tan fácil y a la vez tan difícil como rechazar la petición, mantenernos firmes y demostrar estar convencidos con nuestra decisión.
Decir NO significa también anteponer nuestros deseos frente a los deseos de otras personas y para eso debemos hacerlo de la manera más asertiva posible, siendo inflexibles pero a la vez compresivos con la otra persona.
2. ¿QUÉ CONSIGO DICIENDO NO?
Logrando dominar el NO reafirmamos nuestra personalidad y aumentamos nuestra autoestima, de hecho, decir NO puede servirnos para tomar el control de nuestra vida y en casos extremos no dejarnos manipular por los demás.
Son muchas las ventajas de decir NO cuando realmente no queremos hacer algo. En muchas ocasiones evitaremos crear falsas expectativas a otras personas, y en el ámbito laboral nos permitirá respetar nuestro plan de trabajo planificado.
Es muy importante saber establecer nuestras prioridades y valorar nuestro tiempo, si realmente estoy dedicando mayor tiempo a cumplir los deseos de otras personas que en cumplir los míos propios, ¿Estoy siendo feliz? ¿Me estoy acercando a mis metas u objetivos?
“Decir NO es la llave que abre la puerta a la libertad”
Aunque los consejos que voy a daros a la hora de decir NO no son el Sancta Sanctorum, si puede ayudaros a dar mejores NOES y lo que es más importante, os ayudará a sentiros mejor cuando demos un NO. Reconozco que en muchas ocasiones somos incapaces de decir NO, pero en mi opinión los pasos que debemos seguir para dar una negativa son:
Escucha sin interrumpir.
Cuando sepas que la otra persona va a pedirte algo es mejor no interrumpir. Deja que hable, darás la sensación de que realmente te interesa su petición y en cuanto termine, tendrás la oportunidad de darle una explicación razonada de porque no puedes complacer su petición sin que él tampoco te interrumpa.
Dí NO sin excusarte.
Siempre que sea posible debemos decir NO sin excusarnos. Un "Lo siento, pero no puedo ayudarte", o un "Realmente me gustaría ayudarte, pero en este momento me es imposible" deberían ser suficientes. Si sentimos el compromiso de que realmente la otra persona se merece una explicación más detallada de por que no puedes complacer sus intereses, pasaríamos al siguiente punto.
Dá una breve explicación.
Definitivamente decir NO si excusarse es la mejor opción, pero cuando la petición nos llega de una persona cercana afectivamente o de una persona con más autoridad que nosotros, nos sentiremos en la obligación de darle una breve explicación.
Es recomendable enfocar siempre el problema en nosotros mismos y no en la petición que la otra persona nos está realizando, por ejemplo, si una persona nos está preguntando si podemos ayudarlo el fin de semana con la mudanza, una buena respuesta sería: "Me encantaría poder ayudarte, pero este fin de semana tengo un compromiso familiar". Como puedes ver, no tiene nada que ver con su petición, rechazarías cualquier otra petición, ya que soy yo el que tengo un problema de disponibilidad.
Insiste en el rechazo.
Si la otra persona insiste en su petición, mantente firme e insiste en tu rechazo de una manera más firme. Mucha gente es en esta parte donde se vuelve débil y la otra persona busca la manera de hacerle cambiar de opinión.
Ofrece una alternativa.
Buscar una alternativa suele ser una buena manera de terminar la conversación. Coméntale que hay otras personas que pueden ayudarle, o que en otro momento tal vez te venga mejor. Podrías usar expresiones como "Ahora mismo no puedo ayudarte, pero si la semana que viene sigues teniendo el mismo problema hago un hueco y lo miramos." o "No puedo ayudarte, pero conozco un par de libros que pueden ayudarte y seguro que puedes hacerlo tu mismo"
4. ¿QUÉ NO DEBEMOS HACER?
No debemos irnos por las ramas a la hora de dar un NO ya que puede sonar forzado, como una excusa o incluso una mentira. No debemos sentirnos culpables por decir NO.
Otro error que solemos cometer es el de convertir la constumbre en obligación. ¿A quién no le ha pasado? Hemos hecho un favor repetidamente a un amigo y parece que ya no podemos decirle NO la siguiente vez que nos haga la misma petición. Hay un dicho muy interesante sobre este tema que dice:
Con esto no estoy diciendo que no hagamos favores, los favores desinteresados son realmente importantes y muchas veces son el reflejo de los sentimientos y la relación que tenemos con la otra persona. Pero tenemos que considerar que pueden convertirse en un arma de doble filo, como hemos visto antes, pueden generar tensiones por sentirnos presionados a hacerlos o que el resultado no sea el esperado y que ocasione un conflicto en nuestra relación."Haz mil favores, no hagas uno y será como si no hayas hecho ninguno".
5. EJEMPLO PRÁCTICO.
Juan lleva toda la semana ocupado con el desarrollo de un nuevo software. El proyecto tiene que estar terminado para la semana que viene y Juan se ha atascado, llama a la puerta de tu oficina con la intención de que le eches una mano el fin de semana.
Juan: "Hola Pedro, tengo que pedirte algo muy importante”
Pedro: "Pasa Juan, siéntate y cuéntame lo que necesitas" (Escucha sin interrumpir)
Juan: ...(petición)...
Pedro: "Lo siento Juan, realmente me gustaría ayudarte, pero este fin de semana es imposible" (Di no sin excusarse)
Juan: "Solo sería el sábado, y cuando terminemos te invito a cenar"
Pedro: "Entiendo que estés apurado pero este fin de semana he quedado con mi cuñado para ayudarle a pintar su casa" (Dá una breve explicación)
Juan: "Es que no voy a llegar a tiempo. ¿No podrías hablar con tu cuñado y quedar con el otro día?
Pedro: "Imposible, pero ahora que me acuerdo tengo un par de libros en casa sobre la tecnología que estas usando y pueden serte de ayuda" (Ofrece una alternativa)
6. CONCLUSIONES FINALES.
Para terminar me gustaría deciros que todas estas recomendaciones deberían aplicarse creando una atmósfera positiva en la que transmitir el mensaje de rechazo a la otra persona, no es lo mismo decir NO con una sonrisa que decir NO colgando bruscamente el teléfono.
Realmente esto es así ya que si estamos haciendo algo a disgusto, lo único que haremos será enfadarnos con la persona que nos ha hecho la petición e incluso con nosotros mismos. Decir NO es un reto al que nos enfrentamos todos los días y con el tiempo la sensación de culpa irá desapareciendo y empezarás a ver como retomas el control de tu vida."El saber decir NO es el arma más potente que tenemos para luchar contra la infelicidad" - O.Naveiras
En resumen, no siempre debemos hacer solo lo que nos apetece, debemos entender que hay personas que necesitan nuestra ayuda y que realmente la merecen. En estos casos, hacer un esfuerzo por nuestra parte puede suponer un avance en la relación con esa persona, pero también debemos saber decir NO a las cosas que realmente nos desagradan, que pueden ser origen de conflicto o que realmente no estamos preparados para hacer.
Y vosotros ¿Sabéis decir NO?
martes, 1 de abril de 2014
Posted by Óscar
10 Consejos para hablar en público

Si puedes hablar lo suficientemente brillante sobre un tema, darás la impresión de que lo dominas. - Stanley Kubrick
1. PREPARA UN ESQUEMA Y ENSAYA
A menos que tu discurso sea improvisado siempre tendrás la posibilidad de realizar un esquema y prepararlo. Ensaya tantas veces como sea necesario. Aunque suene tópico exponer nuestro discurso frente al espejo puede ayudarnos a eliminar gestos o comportamientos que no nos gustan de nuestra presentación. Si después de nuestro discurso va haber turnos de preguntas, plantéate algunas preguntas que pueden hacerte y ensaya las respuestas, una buena contestación de las mismas puede suponer el éxito o el fracaso de tu charla.
2. HABLAR ALTO Y CLARO
Debes hablar alto, para que todo el mundo pueda escuchar lo que estás diciendo y vocalizar perfectamente. Debemos evitar titubear o mostrar inseguridad, cuanto más seguridad demostremos más parecerá que dominamos el tema.
3. NO USAR COLETILLAS
Las coletillas excesivas generan inseguridad en el interlocutor dando la sensación de que no se domina el tema o que realmente no sabemos muy bien lo que estamos diciendo. Por este motivo intenta evitar coletillas inciales como eh.. mmm.. o finales como son ¿vale? ¿no? Realmente en la mayoría de los casos el uso de estas coletillas es involuntario y antes de corregirlas deberás detectarlas y ser consciente de que las tienes y hacer un gran esfuerzo por evitarlas.
4. APRENDER DE MEMORIA LA INTRODUCCION
Los nervios iniciales tienden a desaparecer a medida que el discurso va fluyendo, por este motivo apréndete de memoria las primeras frases de tu discurso, esto te ayudará a ir ganando seguridad y poder romper el silencio de la sala con más facilidad.
5. CUIDA TU IMAGEN
La imagen es una parte fundamental a la hora de hablar en público ya que toda la atención recaerá sobre ti. Como en muchas ocasiones la primera impresión es la que cuenta, debes ir vestido de manera formal para la ocasión, adecuándote al lugar, cultura o costumbres de donde te encuentres y de la gente que va a asistir a la presentación.
6. MIRAR A LOS ESPECTADORES
Intenta mantener la mirada en los espectadores, no mires al suelo, o a un lado, ya que darás la sensación de que tienes algo que esconder. Lo mejor es mirar al público en general, repartiendo la mirada entre todos los espectadores y no centrándose en las primeras filas y mucho menos en un único individuo.
7. COLOCA CORRECTAMENTE MANOS Y PIES Y GESTICULA ADECUADAMENTE
En todos los cursos de técnicas de comunicación que he realizado coinciden en que el lenguaje no verbal es mucho más importante que el contenido de lo que se está diciendo realmente. Esto es así hasta tal punto que valoran en un 80% la importancia no verbal frente a la verbal.
La forma de como muevas las manos, los pies o como te muevas por la sala pueden generan un buen ambiente en tu público o todo lo contrario. Debes acompañar lo que estas diciendo con los gestos adecuados, si quieres trasmitir emoción, seriedad, alegría... etc...
8. INTENTA NO LEER.
La única excusa que puedes tener para leer un discurso es que no sepas sobre el tema del cual estás hablando, o que realmente sea el discurso de otra persona y estés leyendo en su nombre. Si el discurso es tuyo y lo has preparado, puedes ser de ayuda un guión o esquema para no olvidarte nada importante pero nunca lleves todo tu discurso escrito.
9. CUIDA LA ENTONACIÓN
Junto con el volumen y el tono de la voz así como la posición de manos y pies, la entonación es una de las partes más importantes de la comunicación no verbal. Dar énfasis en el momento oportuno, mostrar suavidad y no hacer un discurso lineal y soso depende de la forma que lo entones.
10. RELÁJATE Y DISFRUTA
Una vez que dominas los puntos anteriores y que has ensayado lo suficiente, no hay motivo para pensar que el discurso pueda salir mal, así que relájate y disfruta del momento intentando captar el feedback de las personas que te están escuchando, improvisando si lo ves oportuno y dando las gracias por su asistencia y atención al finalizar el mismo.
Un último consejo que me gustaría daros a la hora de hablar en público es que siempre que podáis os grabéis en vídeo, será la forma de detectar aquellas cosas que queréis mejorar. Esa posición de las manos no era correcta, he usado varias veces coletillas, o he hablado demasiado rápido al principio del discurso, son cosas que podéis corregir si os habéis grabado vuestra presentación en vídeo.
10 Habilidades de comunicación que un líder debería dominar

Uno de los principales errores que cometemos es pensar que, como nos pasamos toda la vida comunicando, no es necesario estudiar técnicas de comunicación. La realidad es muy diferente; la comunicación es todo un arte y para dominarla se requiere disciplina, esfuerzo y dedicación.
La comunicación es muy importante para el éxito de los proyectos. Tenemos que pensar que, la mayor parte de las tareas planificadas que realizamos en nuestro día a día pueden ser consideradas proyectos y no es necesario que sean grandes proyectos empresariales. En multitud de ocasiones todos seremos "líderes de proyecto", ya sea planificando unas vacaciones, organizando una fiesta de cumpleaños o preparando una clase para nuestros alumnos. Os animo a que siempre que hablemos de proyectos penséis en proyectos personales, ya que si conseguís desarrollar estas habilidades en ellos, lo haréis también en los profesionales.
El Project Management Institute (PMI) nos dice que un director de proyecto invierte alrededor de un 90% de su tiempo en comunicar.
En otras palabras, un director de proyecto debería usar la mayor parte de su tiempo escribiendo e-mails, realizando presentaciones, atendiendo y/o realizando llamadas telefónicas, convocando o asistiendo a reuniones, etc. Por este motivo cuando hablamos de mejorar nuestra comunicación nos referimos a mejorar tanto la comunicación oral como la escrita, la verbal como la no verbal y cualquier otro tipo de habilidad que se os ocurra que pueda afectar a la misma.
En este artículo enumeraremos 10 de las habilidades de comunicación más importantes que todo coach o director de proyecto debería dominar.
1. Saber comunicar de manera eficaz y eficiente.
Para alcanzar el éxito en un proyecto, el líder debe ser un buen comunicador, ya que de él depende que los miembros del equipo compartan un objetivo, se responsabilicen y comprometan con éste. El compromiso alcanzado con el objetivo depende en gran parte de la efectividad con que sea comunicado. Siempre debemos generar información relevante, verídica, clara y precisa para ganarse la confianza del equipo.
2. Saber escuchar activamente y de forma efectiva.
Aunque parece otra característica obvia en la comunicación, muchos directores de proyecto tienen el defecto de solo formarse en la manera de comunicar y pocas veces se plantean mejorar la manera de escuchar. Es fundamental aprender técnicas de escucha activa para hacer sentir escuchados a los miembros del equipo, saber obtener lo fundamental de las conversaciones y poder cambiar de opinión si es necesario.
3. Hacer preguntas oportunas en el momento oportuno.
Como decía Aristóteles: “La duda es la cuna de la sabiduría”. No debemos quedarnos nunca con dudas que puedan dar lugar a ambigüedades o confusiones. Dominando la habilidad de preguntar lograremos una mejor optimización del desempeño eliminando trabajo en exceso y por otra parte ahorraremos malentendidos y posibles conflictos.
4. Asegurarse de que la información es bien entendida.
Una vez comunicada la información a los distintos miembros del equipo, es fundamental comprobar que la información ha sido recibida correctamente. Usando la habilidad de preguntar y la de escuchar, que hemos nombrado antes, debemos asegurarnos que la información ha sido bien entendida y que todo el mundo comprende sus tareas y responsabilidades.
5. Motivar y formar al equipo hasta conseguir su implicación.
La comunicación con el equipo para detectar faltas de conocimiento, problemas de motivación o posibles obstáculos o barreras que impiden el desarrollo normal del trabajo es una parte vital de la gestión de personas. Benjamin Franklin escribió: “Dime y lo olvido, enséñame y lo recuerdo, involúcrame y lo aprendo”. Siempre debemos motivar al equipo y hacerle sentir una parte importante del proyecto para conseguir su implicación con el mismo.
6. Ser asertivo en la medida de lo posible.
Dependiendo de la situación, a veces debemos usar tipos de comunicación diferente, por ejemplo una comunicación agresiva o pasiva, no obstante, un buen líder debería hacer de la asertividad la forma de comunicación genérica. Ser asertivo nos permite manifestar nuestra opinión y defender nuestro objetivo en cualquier ámbito de la vida sin resultar violento.
7. Establecer y gestionar expectativas.
Muchas veces, ya sea por desconocimiento funcional o tecnológico, lo que un cliente necesita no es exactamente lo que pide. En este caso, el éxito del proyecto pasa por una gestión eficaz de las expectativas del cliente por parte del director de proyecto. Realizar una buena obtención de requisitos y un análisis de viabilidad del proyecto deben ser dos de los puntos de partida.
8. Enfocar la comunicación a un impacto estratégico.
Es fundamental pensar previamente que es lo que queremos comunicar y que impacto estratégico queremos conseguir con lo que vamos a expresar. ¿Queremos motivar?, ¿obtener conformidad?, ¿compromiso?. Es decir, debemos darle intencionalidad a nuestra comunicación y planear cual será la mejor manera de emitir el mensaje ¿un email?, ¿una llamada?, ¿lenguaje formal o informal?
9. Habilidades de negociación y resolución de conflictos.
Es básico saber resolver conflictos, tanto internos como externos y sobre todo aprender a detectarlos y prevenirlos.
Por otra parte la negociación es una habilidad que está presente en nuestro día a día, nos pasamos la vida negociando, ya sea con nuestra pareja, nuestro grupo de amigos, nuestro jefe o nuestros proveedores; a donde iremos de vacaciones, si es momento de tener un hijo, una revisión salarial con nuestro jefe o una rebaja del precio solicitada al proveedor.
Estas habilidades son dos de las más importantes en la comunicación y, por lo tanto, es mi intención escribir sobre este tipo de habilidades en próximos artículos de este blog.
10. Resumir, aprender de los errores y conocer siempre el siguiente paso.
El director de proyecto debe ser el que tiene la visión global del proyecto, es su compromiso saber en que situación se encuentra en cada momento, así como saber siempre cual será el siguiente paso. Esto se consigue comunicándose e interactuando con el resto de personal implicado en el proyecto y dando forma a toda la información que recibe. Un líder de proyecto debería poder siempre resumir, recapitular y responder de manera rápida a las dudas o sugerencias de los miembros del equipo en cualquier punto del proyecto. Hacer acopio de las lecciones aprendidas durante el desarrollo de un proyecto es una buena práctica para no caer en los mismos errores en el futuro.
Como decíamos al principio del artículo, tener un dominio de estas habilidades de comunicación no solo es útil para directores de proyectos empresariales si no que mejorará nuestra habilidad de comunicación en nuestro día a día y en nuestros "proyectos personales".
Seguramente se os ocurran muchas otras habilidades importantes a destacar en la comunicación y que no hayan sido nombradas en este artículo. Os animo a escribir algún comentario con las que consideréis importantes.
Si lo que queréis es mejorar vuestra comunicación a la hora de hablar en público os recomiendo que leáis el artículo: 10 consejos para hablar en público.
1. Saber comunicar de manera eficaz y eficiente.
Para alcanzar el éxito en un proyecto, el líder debe ser un buen comunicador, ya que de él depende que los miembros del equipo compartan un objetivo, se responsabilicen y comprometan con éste. El compromiso alcanzado con el objetivo depende en gran parte de la efectividad con que sea comunicado. Siempre debemos generar información relevante, verídica, clara y precisa para ganarse la confianza del equipo.
2. Saber escuchar activamente y de forma efectiva.
Aunque parece otra característica obvia en la comunicación, muchos directores de proyecto tienen el defecto de solo formarse en la manera de comunicar y pocas veces se plantean mejorar la manera de escuchar. Es fundamental aprender técnicas de escucha activa para hacer sentir escuchados a los miembros del equipo, saber obtener lo fundamental de las conversaciones y poder cambiar de opinión si es necesario.
3. Hacer preguntas oportunas en el momento oportuno.
Como decía Aristóteles: “La duda es la cuna de la sabiduría”. No debemos quedarnos nunca con dudas que puedan dar lugar a ambigüedades o confusiones. Dominando la habilidad de preguntar lograremos una mejor optimización del desempeño eliminando trabajo en exceso y por otra parte ahorraremos malentendidos y posibles conflictos.
4. Asegurarse de que la información es bien entendida.
Una vez comunicada la información a los distintos miembros del equipo, es fundamental comprobar que la información ha sido recibida correctamente. Usando la habilidad de preguntar y la de escuchar, que hemos nombrado antes, debemos asegurarnos que la información ha sido bien entendida y que todo el mundo comprende sus tareas y responsabilidades.
5. Motivar y formar al equipo hasta conseguir su implicación.
La comunicación con el equipo para detectar faltas de conocimiento, problemas de motivación o posibles obstáculos o barreras que impiden el desarrollo normal del trabajo es una parte vital de la gestión de personas. Benjamin Franklin escribió: “Dime y lo olvido, enséñame y lo recuerdo, involúcrame y lo aprendo”. Siempre debemos motivar al equipo y hacerle sentir una parte importante del proyecto para conseguir su implicación con el mismo.
6. Ser asertivo en la medida de lo posible.
Dependiendo de la situación, a veces debemos usar tipos de comunicación diferente, por ejemplo una comunicación agresiva o pasiva, no obstante, un buen líder debería hacer de la asertividad la forma de comunicación genérica. Ser asertivo nos permite manifestar nuestra opinión y defender nuestro objetivo en cualquier ámbito de la vida sin resultar violento.
7. Establecer y gestionar expectativas.
Muchas veces, ya sea por desconocimiento funcional o tecnológico, lo que un cliente necesita no es exactamente lo que pide. En este caso, el éxito del proyecto pasa por una gestión eficaz de las expectativas del cliente por parte del director de proyecto. Realizar una buena obtención de requisitos y un análisis de viabilidad del proyecto deben ser dos de los puntos de partida.
8. Enfocar la comunicación a un impacto estratégico.
Es fundamental pensar previamente que es lo que queremos comunicar y que impacto estratégico queremos conseguir con lo que vamos a expresar. ¿Queremos motivar?, ¿obtener conformidad?, ¿compromiso?. Es decir, debemos darle intencionalidad a nuestra comunicación y planear cual será la mejor manera de emitir el mensaje ¿un email?, ¿una llamada?, ¿lenguaje formal o informal?
9. Habilidades de negociación y resolución de conflictos.
Es básico saber resolver conflictos, tanto internos como externos y sobre todo aprender a detectarlos y prevenirlos.
Por otra parte la negociación es una habilidad que está presente en nuestro día a día, nos pasamos la vida negociando, ya sea con nuestra pareja, nuestro grupo de amigos, nuestro jefe o nuestros proveedores; a donde iremos de vacaciones, si es momento de tener un hijo, una revisión salarial con nuestro jefe o una rebaja del precio solicitada al proveedor.
Estas habilidades son dos de las más importantes en la comunicación y, por lo tanto, es mi intención escribir sobre este tipo de habilidades en próximos artículos de este blog.
10. Resumir, aprender de los errores y conocer siempre el siguiente paso.
El director de proyecto debe ser el que tiene la visión global del proyecto, es su compromiso saber en que situación se encuentra en cada momento, así como saber siempre cual será el siguiente paso. Esto se consigue comunicándose e interactuando con el resto de personal implicado en el proyecto y dando forma a toda la información que recibe. Un líder de proyecto debería poder siempre resumir, recapitular y responder de manera rápida a las dudas o sugerencias de los miembros del equipo en cualquier punto del proyecto. Hacer acopio de las lecciones aprendidas durante el desarrollo de un proyecto es una buena práctica para no caer en los mismos errores en el futuro.
Como decíamos al principio del artículo, tener un dominio de estas habilidades de comunicación no solo es útil para directores de proyectos empresariales si no que mejorará nuestra habilidad de comunicación en nuestro día a día y en nuestros "proyectos personales".
"Entrenando la comunicación mejoraremos las relaciones personales con nuestros compañeros de trabajo, con nuestros familiares o con nuestro grupo de amigos, obteniendo mayores logros, haciendo sentir escuchada a la gente que nos rodea y sintiendo uno mismo que su opinión también se tiene en cuenta"
Seguramente se os ocurran muchas otras habilidades importantes a destacar en la comunicación y que no hayan sido nombradas en este artículo. Os animo a escribir algún comentario con las que consideréis importantes.
Si lo que queréis es mejorar vuestra comunicación a la hora de hablar en público os recomiendo que leáis el artículo: 10 consejos para hablar en público.
lunes, 19 de noviembre de 2012
Posted by Óscar